J. Aimara, A. Montero, N. Sagñay, N. Sagñay
La violencia es un problema permanente que afecta a la sociedad, a lo largo de los años se ha evidenciado que está presente en distintas esferas, la falta de valores y respetos inculcados desde casa, ocasiona que algunas personas se crean superiores y con el control sobre sus semejantes. La OMS (Organización Mundial de la Salud) define a la violencia como “El uso intencional de la fuerza física, amenazas contra uno mismo, otra persona, un grupo o una comunidad que tiene como consecuencia un traumatismo, daños psicológicos, problemas de desarrollo o la muerte.
Hace años se creía que el marido era la autoridad y la esposa estaba subordinada, a ella se le creía inferior por su condición de ser mujer, en la actualidad existe un cambio radical, transformando el pensamiento que las personas del sexo femenino no pueden ser integrantes de una sociedad participativa en la que exponen sus ideas y demuestran su talento.
El confinamiento
La crisis del covid-19 a nivel mundial, desata grandes cambios en el estilo de vida de las personas, el aprender nuevas maneras de vivir y llevar a cabo el proceso de supervivencia, dejando al descubierto aspectos como la unión familiar, el compromiso y apoyo en los que se deben pone mayor atención. Alexis Eduardo Romero Poma en su proyecto de investigación “EL CONFINAMIENTO Y LA VIOLENCIA INTRAFAMILIAR DE LOS ESTUDIANTES DE BÁSICA SUPERIOR CON VULNERABILIDAD DE LA UNIDA EDUCATIVA HISPANO AMERICA” menciona, que el aislamiento se utiliza como una herramienta para prevenir la propagación de enfermedades infecciosas entre las personas. Sin embargo, se debe considerar si el beneficio de esta cuarentena compensa el posible daño psicológico durante este periodo, donde 90 países están en situación de confinamiento, 4000 millones de personas se refugian en casa para evitar el contagio, sin saber que le conlleva a otro peligro mortal.
EL confinamiento y los más vulnerables
En los últimos 12 meses, 243 millones de jóvenes (de edades entre 15 y 49 años) de todo el mundo sufren violencia intrafamiliar, esto los convierte en los más afectados, debido a que mantienen un estilo de vida más activa que los adultos. Se suman también los niños, por su corta edad son vulnerables a adquirir el virus, una situación grave para ellos, la interrupción tan temprana a la que se someten y al permanecer en casa evidencian maltratos e incluso son parte de ellos, las reacciones que vemos en los niños ahora es el resultado del estrés agudo, como el desequilibrio emocional, que les hace pagar más horas de sueño, espasmos nerviosos, miedo e irritabilidad.
La comunicación con los niños, ayuda a controlar el miedo y la tristeza, despertando paz y esperanza. Hablar sobre su regreso a las actividades cotidianas, realizar actividades que ayuden a descargar sus emociones, como correr y saltar es una excelente técnica para controlarlos. Todos los procedimientos que se puedan utilizar para descargar la energía contenida de los más afectados, ayuda a su distracción y a una mejor comprensión de la situación, para culminar el proceso de aislamiento con éxito.
Se realiza un cuestionario semiestructurado con un enfoque en Violencia Intrafamiliar enmarcado en 10 preguntas avaladas por un profesional, analizando el ambiente y funcionalidad familiar, en el que se determina el nivel de violencia dentro de los hogares de los estudiantes de básica superior, con el método cuantitativo recolectan datos estadísticos e informativos sobre la problemática planteada, lo que permiten realizar un estudio más claro y plantear alternativas para identificar a tiempo esta problemática.
Medidas de Prevención
Dentro de las medidas preventivas se debe considerar a la educación, sin duda es el pilar fundamental para trabajar y tratar la violencia, evita en este caso que sea un problema mayor, trasmitir los principios y valores desde edades tempranas garantiza un correcto manejo y solución de problemas.
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