J. Aimara, A. Montero, N. Sagñay, N. Sagñay
La música nació en la prehistoria 50.000 años a. c, se ha demostrado una relación entre humanos y la música en la cual, surgía interpretaciones tradicionales a través de las actividades intelectuales en el concepto de sobrenatural, transformándola con una finalidad supersticiosa, mágica o mística.
En la antigüedad, el hombre primitivo encontraba música en la naturaleza y en su propia voz por ende, aprendió a crear sonido con: huesos, cañas, troncos, conchas. Hace 5.000 años a. c, existían instrumentos de percusión y cuerda como: la lira y arpa, sus cantos eran lamentaciones sobre textos poéticos. También la música se basada principalmente en ritmos y movimientos de imitaciones de animales.
Hace 476 años d, c. en la antigua Grecia mostraron la importancia en la educación y la moral en la música, porque se relacionaba con el poema épico y la filosofía. En aquella época se consideraba la música y la danza como cultura, los instrumentos que utilizaban son: las liras, cítaras, aulós, siringa, flauta de pan, tambores, castañuelas.
La música en la actualidad: influye en el comportamiento de los niños y adolescentes por ende, pueden adquirir las capacidades y expresarse a través de ella. En el año 1995 Lacarcel Moreno, afirmaba que la música es considerada como una musicoterapia por sus elementos: sonido, ritmo, melodía y armonía, en la cual, promueve la comunicación 6%, las relaciones 10%, aprendizajes 25%, movimientos 25%, emociones 15%, sociales y cognitivas 19%, porque sirve como rehabilitación y tratamiento para las personas con discapacidad.
Estudiantes de la Unidad Educativa “Emanuel” y el Centro Inclusivo “El Peral”, pertenecientes del cantón Ambato, son parte de un estudio que analiza la habilidad social, debido que son capacidades innatas porque en diversos casos dependen de la maduración, experiencia y aprendizaje. “Metodología de intervención psicopedagógica basada en la práctica musical para el desarrollo de las habilidades sociales de niños, niñas y adolescentes con necesidades educativas especiales asociadas o no a una discapacidad en la provincia de Tungurahua-Ecuador” el proyecto es realizado por la Docente Ximena Cumandá Miranda López de la Facultad Ciencias Humanas y de la Educación de la Universidad Técnica de Ambato, con el objetivo de aplicar la interpretación de instrumentos musicales, canto y la danza.
Además, la habilidad musical aumenta las probabilidades de adquirir aprendizajes significativos que servirá para toda la vida, es asociada con los procesos básicos psicológicos como: atención, memoria, habilidad, estado de ánimo de los niños y adolescentes.
Se realizó una encuesta a cuarenta y nueve niños, adolescentes entre los 8 a 16 años, con y sin discapacidad, las alternativas de forma cuali-cuantitativa, con el propósito de relacionar y explicar de manera cuasi-experimental, intra-sujeto; las opciones que se seleccionó para llevar acabo el pre test son: edad, sexo, habilidad social, comportamiento social y competencia musical de niños como adolescentes.
La música desempeña una función esencial en la vida del ser humano, cuando se inicia un contacto con la melodía se puede trasmitir un efecto positivo para el desarrollo integral de la persona a nivel cognitivo, sensorio-motriz y social-afectivo. Son varias las posibilidades de intervención en el ámbito de las necesidades educativas especiales que ofrece la música.
La propuesta del grupo de Investigadores, de la Facultad de Ciencias Humanas y de la Educación de la Universidad Técnica de Ambato (UTA), se enfocaron en la metodología musical Orff que consiste en el aprendizaje y enseñanza de la música mediante el uso de la voz, cuerpo y baile, realizando una serie de actividades motivadoras para fomentan la participación y experimentación de los niños y adolescentes con necesidades especiales (NEE), donde se puede trabajar los diferentes aspectos de la música como: ritmo, armonía, melodía y timbre de manera dinámica.
En los estudios académicos se ha demostrado que la música es importante para la enseñanza en diferentes asignaturas: lenguaje, matemáticas, idiomas y lectura. Por tanto, los niños y adolescentes aprenden a tocar un instrumento musical, porque aumentan su coeficiente intelectual.
La música mejora la fluidez de expresión
Al cantar y bailar se desarrolla la expresión corporal y movimiento corporal, el adolescente entona la letra de una canción resulta sencillo cuando conoce el ritmo, en cambio el niño puede repetir frases complejas de otro modo no la utilizaría. El baile le aporta la capacidad de expresarse con el cuerpo y tocar un instrumento añade una nueva forma de comunicación.
Enriquecimiento del intelecto
La evocación de recuerdos relacionados con la música provoca un desarrollo intelectual mayor en el niño. La creación de memorias está relacionada en muchas ocasiones con canciones y hay recuerdos concretos que se despiertan con gran facilidad al volver a escucharlas.
Mayor control de los estados de ánimo
La música se relaciona con las emociones de los niños, adolescentes y adultos. Cuando se escucha la melodía correcta se puede relajar y olvidar del estrés, es recomendable que los ritmos sean alegres para el estado emocional de los individuos.
Mejora de la salud
La música tiene el efecto de aliviar el dolor y fortalecer el sistema inmunológico, también ayuda a coordinar la respiración, los latidos del corazón en la cual, consigue calmar y relajar al escuchar las melodías tranquilas y alegres que ayuda la recuperación tanto física como mental. Está comprobado que la música es importante para el ambiente infantil para que los padres y educadores, deben utilizar la melodía y canción en la educación del niño como adolescentes.
Este proyecto benefició a los niños y adolescentes de la Unidad Educativa “Emanuel” y el Centro Inclusivo “El Peral”, se realizó con instrumentos de valoración psicopedagógica antes y después del desarrollo de la metodología musical en la cual, se puede verificar el comportamiento de los individuos. También se analizó el procediendo de la investigación en los ambientes escolares y cotidianos en que se desenvuelven, posteriormente se aplicó la metodología musical de participación activa Orff, como herramienta para facilitar las relaciones sociales y catalizador de aprendizaje, finalmente se elaboró una guía psicopedagógica virtual dirigido a estudiantes, docentes y padres de familia.
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